Inédito

Siempre fuiste para mí

Dedicado a Sofía

Siempre fuiste para mí misteriosa y lejana,
Te conocí de pronto una soleada mañana
Motivada de cantos de aves que un día en tu ausencia aborrecí
Contigo aprendí a volar por alturas increíbles,
Recuerdo aquellas primeras pruebas
De las cuales jamás quise bajar pues viví experiencias
Sobre, mi propia existencia,
Fue genial integrarme a tu mundo, saltar sobre nubes de luz,
Bailar con las estrellas y soñar ser una de ellas
Siempre fuiste para mí, pues lo supe desde el primer instante
Salí de un mundo de sombras
Conocí el mundo exterior y sentí una brisa tan suave y a la vez penetrante que me embriagaba y obligome separarme de mi fiel tabernáculo para palpar lo real, lo dulce, para sentir en mi interior íntegramente la felicidad.